Resumen
Comunidad autónoma: Principado de Asturias
Provincia: Asturias
Municipio: Oviedo
Parroquia: Oviedo
Entidad: Oviedo
Zona: Centro de Asturias
Situación: Montaña de Asturias
Comarca: Comarca de Oviedo
Clasificación: Reseñas históricas
Clase: Arte, cultura y deporte
Tipo: Escritores
Dirección: Oviedo
Código postal: 33009
Web del municipio: Oviedo
E-mail: Oficina de turismo
E-mail: Ayuntamiento de Oviedo
Descripción
Escritor y folclorista, Constantino Cabal Rubiera-Iglesias —nombre completo de Constantino Cabal— nació en Oviedo (Asturias) el 16 de mayo de 1877.
Hizo los estudios primarios en la escuela de don Juan Muñiz, quien muy pronto lo ocuparía en su labor docente como ayudante; a la vez cursó también estudios en el Seminario ovetense, cubriendo sus matrículas con las de honor que sacaba en los exámenes.
Nació a la vida periodística de la mano de Maximiliano Arboleya, quien dirigía El Zurriago Social, publicación artística y combativa. De acuerdo con el periódico escribió las Odas despampanantes, que aparecieron firmadas con el seudónimo de Ludeamaro.
En el año 1900 ingresó en la redacción del diario ovetense El Carbayón y popularizó en sus páginas, además del ya indicado, el seudónimo Triquitraque, que utilizaba en trabajos humorísticos. Entonces (1904-1905) apareció en el diario al que pertenecía su primera obra extensa, Psiquis, y fue publicada otra con el título de Las memorias de un enfermo (Oviedo, 1904).
A finales de 1905 marchó para La Habana; allí fue presentado por el presidente del Centro Asturiano, Juan Bances Conde, al periodista villaviciosino Nicolás Rivero, director del Diario de la Marina, redacción de la que iba a formar parte. Desempeñó luego varios cargos, publicó poemas, críticas de libros de teatro y reportajes. Al morir Curros Enríquez, se ocupó de la sección que éste llevaba sobre la vida y la política españolas. Firmaba sus escritos con el seudónimo de Eneas, que utilizaba con el permiso de Bolaños, llevó a cabo campañas de mucha polémica en defensa de los intereses morales y materiales de España en Cuba, y su éxito periodístico lo llevó a ser el español de más fama en la isla antillana. Una selección de sus poemas fue publicada bajo el título Del amor, en 1907. En este mismo año contrajo matrimonio con la poetisa Mercedes Valero Valdés. La campaña alrededor de las prácticas de brujería, a propósito del asesinato de dos niños en ceremonias rituales de hechicería, hizo que el Diario de la Marina se pusiera de venta directa en las calles, abandonando el proceso de venta por suscripción que venía siendo el habitual.
Fue nombrado corresponsal del periódico en Madrid, donde vino en 1910. A la vez, trabajó asiduadamente en el Archivo Histórico, en la Biblioteca Nacional y en la Real Academia de la Historia; visitó también con frecuencia los archivos de Simancas, de El Escorial, de las catedrales de Oviedo y de Compostela.
En 1914 pasó algunos meses en La Habana, donde escribió el drama asturiano Los osos, en el que empleó, por una apuesta entre compañeros, menos de una semana. Fue estrenada la obra al año siguiente en el Teatro de la Comedia de Madrid, por una de las mejores compañías españolas, la del nombrado comediante Enrique Borrás. Con el mismo gran éxito fue presentada en el Teatro Campoamor de Oviedo.
Casi toda la segunda decena del siglo la dedicó Cabal a la erudición histórica. Sus conocimientos del latín paleográfico le permitieron penetrar en las fuentes de la Edad Media Asturiana; pronto sus libros sobre Asturias serán importantes y comentados por Ramón Menéndez Pidal, Antonio Ballesteros Beretta y Claudio Sánchez Albornoz; de acuerdo con Menéndez Pidal, poseía una «intuición de historiador»; por eso, su obra tiene un importante lugar en la historiografía asturiana. Su primer libro sobre esta materia fue Covadonga (Madrid, 1918; 2ª edición en 1924) en la conmemoración del duodécimo centenario de la batalla.
Al año siguiente publicó el libro titulado Libro de cómo se hacen todas las cosas, confidencias de las figuras literarias y artísticas más famosas de todo aquel tiempo: Palacio Valdés, Pardo Bazán, Jacinto Benavente, Ramón Menéndez Pidal, etc.; estrenó La presa de las águilas y Majestad (ésta por la compañía de Conchita Torres), publicadas en Madrid en 1924, y escribió La sementera de la sal (s. a.) y Capitán de romancero, que editaría años después (1949), Llama de Lar y la Hora del Yunque (s. a.). El teatro de Cabal en verso corresponde al estilo nuevo del drama de capa y espada que tuvo tanto éxito en la primera mitad del siglo XX con las obras de Marquina y Villaespesa, entre otros.
Llamado a La Habana para que ocupase el cargo de subdirector del Diario de la Marina, no le apeteció abandonar España y, sobre todo, su querida Asturias, a la que venía con frecuencia desde Madrid. Así, para poder vivir en España y trabajar en Asturias aceptó la dirección en 1925 del periódico de tendencia católica Región, de Oviedo, cargo que ocupó hasta el otoño de 1928, año en que se marchó para dirigir el periódico El Día de Palencia durante algún tiempo; al cesar en éste volvió para Oviedo y fue nombrado Cronista de Asturias y director de la biblioteca provincial de Asturias. Para agrandar esta última hizo un llamamiento a todos los asturianos y amantes de la región recomendándoles encarecidamente que donasen libros a la institución; comenzaron a llegar miles de libros, y cuando sus planes iban a hacerse realidad, fue destituido con la llegada de la Segunda República.
En 1937 regresó para La Habana y volvió a la redacción del Diario de la Marina. En España sus artículos seguirían siendo muy comentados y difundidos por la prensa de habla hispana.
Al finalizar la Guerra Civil fue nombrado Periodista de Honor y, ya anciano, recuperó el cargo de Cronista de Asturias. Cuando se creó el Instituto de Estudios Asturianos (IDEA) intervino directamente en el mismo en calidad de miembro de número y de director de su boletín. Participó en los actos culturales que se celebraron a propósito del mil ciento aniversario de Alfonso II el Casto y continuó la labor de investigador, folclorista y escritor en castellano y en asturiano.
En 1964 le concedieron la Cruz de la Victoria, que le fue entregada en un acto académico al que asistieron todas las Corporaciones y personalidades asturianas y una representación del Centro Superior de Investigaciones Científicas. Con tal motivo le rindieron varios homenajes y el IDEA le dedicó el n.º 63 de su boletín.
Perteneció como miembro correspondiente a las Reales Academias de la Historia y Bellas Artes y estaba en posesión de la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio.
Falleció en Oviedo en 1967.
A él se deben varios obras sobre el folclore asturiano: Cuentos, leyendas y tradiciones (Madrid, 1923), Las costumbres asturianas, su significación y sus orígenes: I. El individuo (Madrid, 1925), y II. La familia, la vivienda, los oficios primitivos (Madrid, 1931), y la trilogía sobre La mitología asturiana: Los dioses de la vida (1925), Los dioses de la muerte (1925) y El sacerdocio del diablo (1928), entre otras. También escribió otras obras históricas además de la anteriormente citada Covadonga, como Alfonso II el Casto (1943) y La Asturias que venció Roma (1953). Asimismo, es autor de biografías, entre ellas la titulada Nombres de Asturias, don Fermín Canella; Nicolás Rivero (1950).
Fuente: Consejería de Cultura del Gobierno del Principado de Asturias - EuroWeb Media, SL.
Concejo de Oviedo
Naturaleza, Arte Prerrománico, fiesta, gastronomía, Premios Princesa… y muchas cosas más en el concejo de Oviedo, ubicado en el corazón de Asturias y su capital es también la del Principado, y fue en el pasado capital del primer reino cristiano de la Península Ibérica y origen del Camino de Santiago.
Los concejos (municipios) que limitan con el Concejo de Oviedo son: Grado, Langreo, Las Regueras, Llanera, Mieres, Ribera de Arriba, Santo Adriano y Siero. Cada uno de estos concejos (municipios) comparte fronteras geográficas con Oviedo, lo que implica que comparten límites territoriales y pueden tener interacciones políticas, sociales y económicas entre ellos.
Comarca de Oviedo
Está en el corazón de Asturias y su capital, Oviedo, es la del Principado y fue en el pasado capital del primer reino cristiano de la Península Ibérica y origen del Camino de Santiago.
La comarca está conformada por uno o varios concejos (municipios). En este caso: Oviedo. Estos concejos representan las divisiones administrativas dentro de la comarca y son responsables de la gestión de los asuntos locales en cada municipio.
Conocer Asturias
«Monumento Natural del Bosque de Muniellos: Considerado uno de los bosques más importantes de Europa, el Bosque de Muniellos es un paraíso natural protegido. Está compuesto por un denso bosque de hayas y robles, y alberga una gran variedad de flora y fauna, incluyendo el oso pardo y el urogallo.»
Dirección
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